Un reconocimiento público

Quiero hoy, 18 de Julio de 2008, recordar 2 hechos que marcaron mi vida.
Un día 18 de Julio de 1977,fallece mi padre. Un día 16 de Abril de 2007 fallece mi madre.
A ambos les debo todo lo que soy, con virtudes que aprendí de ellos y con fallas que me pertenecen.

Cuando ya han pasado algunas lunas de estos hechos, quiero expresar mi gratitud eterna a ellos, mis padres, también mi inmenso amor y respeto por lo que fueron en vida y finalmente, expresar que mi alma está cada día más en paz con ellos.

Les quiero dejar esta lectura que es justamente un mensaje de un niño en paz consigo mismo.

Un padre va con sus hijos al restaurante.
Su hijo de seis años preguntó si podía dar las gracias.
Cuando inclinaron las cabezas el dijo.
-Dios es Bueno, Dios es Grande Gracias por los alimentos,
yo estaría aun mas agradecido si mi mamá nos diese helado para el postre.
Libertad y justicia para todos. Amén.

Junto con las risas de los clientes que estaban cerca una señora comentó.
-Eso es lo que está mal en este país, los niños de hoy en día no saben como orar…

Pedir a Dios helado...nunca había escuchado eso antes…
Al oír esto el niño comenzó a llorar y preguntó a su padre
-lo hice mal? Está enojado Dios conmigo?
Lo abrazó y le dijo que había hecho un estupendo trabajo
y que Dios seguramente no estaría enojado con él
Un señor de edad se aproximó a la mesa, le guiñó un ojo y le dijo.
Llegué a saber que Dios pensó que aquella fue una excelente oración
En serio? Preguntó el niño
Luego en un susurró dramático añadió indicando a la mujer cuyo comentario había iniciado todo el asunto.
-¡Muy mal… ella nunca pidió helado a Dios… un poco de helado, a veces,
es muy bueno para el alma.
Como era de esperar, el padre compró a sus niños helados al final de la comida.
El niño se quedó mirando fijamente el suyo por unos momentos
y luego hizo algo que su padre nunca olvidará por el resto de su vida.

Tomó su helado y sin decir una sola palabra avanzó hasta ponerlo frente a la señora
y con una gran sonrisa dijo:
Tómelo, es para usted, el helado es bueno para el alma y mi alma ya está bien…

Gracias Papá y Mamá, los amo desde aquí.

Saludos desde Chillán.